La Divina Comedia de Dante resuena en el Vaticano

Ciudad del Vaticano/Los versos del Infierno que Dante Alighieri imaginó en su inmortal Divina Comedia resuenan esta semana frente al Vaticano con una lectura pública enmarcada en los preparativos del Jubileo de 2025.

La recitación tiene lugar esta semana al caer la noche, a las 21:00, en la plaza Pio XII, frente la plaza y la basílica de San Pedro, con la voz del actor Franco Ricordi, reconocido intérprete de la obra.

Estas primeras citas estarán dedicadas a la parte del Infierno, mientras que a lo largo de 2025 se entonarán los capítulos restantes del Purgatorio y el Paraíso, según Vatican News.

El evento se enmarca en las actividades previas del Año Santo, que será inaugurado por el Papa Francisco el 24 de diciembre, y ha sido organizado por el ayuntamiento de Roma y el Dicasterio para la Evangelización de la Santa Sede.

El Vaticano será así el escenario de esta obra capital de la literatura italiana, escrita a comienzos del siglo XIV, en la que el poeta recorre imaginariamente el Infierno, el Purgatorio y el Paraíso, toda una alegoría escrita durante su exilio de Florencia por las guerras entre guelfos y gibelinos.

El espectáculo empezará con el periplo imaginario de Dante por los nueve círculos del Inframundo para evocar frente al Vaticano a todos los demonios, almas en pena y personajes históricos de su propio tiempo que se encontró en sus penosas oscuridades.

Dante no fue clemente con varios papas de su tiempo y situó en el Infierno a Bonifacio VIII, su gran enemigo, o a Celestino V, un eremita que acabó renunciando al pontificado a finales del siglo XIII (gesto que Benedicto XVI repetiría en 2013).

Pero en el Vaticano también resonarán en el futuro los versos del Purgatorio, el lugar en el que Dante sitúo a los personajes que podían aspirar a la salvación pese a sus pecados, y también el Paraíso, el reino de las almas puras, como su amada Beatrice.

Pese a sus duras críticas al poder pontificio de su tiempo, el poeta fue "rehabilitado" en 1921 por Benedicto XV, que le dedicó una encíclica por el sexto centenario de su muerte, y un siglo después, en 2021, Francisco lo volvió a ensalzar con la carta apostólica Candor Lucis Aeternae.

La Comedia -el apelativo Divina se lo pondría más tarde Boccaccio- conjuga la narración histórica de aquellos convulsos años con profundas alegorías y reflexiones filosóficas pero también es una obra "eminentemente teatral", según sostiene Ricordi.

Naturalmente no es posible leer toda la obra por completo, dada su gran dimensión, sino que se ofrece "una síntesis" de los cantos más sobresalientes y el intérprete explica al público lo que ocurre en las partes que no sean recitadas.