La separación de Cristina Pedroche y el chef Dabiz Muñoz va en serio

La contertulia de 'Zapeando', embarazada de su segundo hijo, se marchó a Vallecas para estar con sus padres. La ruptura es evidente según la revista 'Diez Minutos'

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La autoexigencia peligrosa del chef Dabiz Muñoz

Cristina Pedroche con la figura de cera de su marido, Dabiz Muñoz, que posa también divertido
Cristina Pedroche con la figura de cera de su marido, Dabiz Muñoz, que posa también divertido

Cristina Pedroche y Dabiz Muñoz, una de las parejas más mediáticas del panorama nacional, continúan alimentando las especulaciones sobre una posible crisis matrimonial. Según revela esta semana la revista Diez Minutos, ambos han optado por caminos separados en las últimas semanas, a pesar de estar esperando su segundo hijo. Las imágenes captadas por la revista muestran los planes individuales de la presentadora y el reconocido chef, cuya relación ha sido objeto de atención desde que comenzaron a surgir rumores de un distanciamiento.

Pedroche, siempre abierta respecto a su vida personal, ha dejado entrever en más de una ocasión las complejidades de convivir con Muñoz, a quien describe como un genio obsesionado por su oficio, como confesaba en el documental de Netflix sobre su esposo. "Es un insatisfecho. Él, de verdad, no es feliz. Es el mejor cocinero del mundo, pero la obsesión por la cocina o por la perfección le lleva a no disfrutar del momento", confesó la presentadora en una entrevista concedida con motivo del estreno del documental de Muñoz en Netflix. Estas palabras, pronunciadas tiempo atrás, cobran ahora un nuevo significado ante los acontecimientos recientes.

Desde hace semanas, la pareja atraviesa un periodo marcado por decisiones que han desconcertado a sus seguidores. Cristina se ha instalado temporalmente en el domicilio de sus padres en Vallecas junto a su hija Laia, argumentando que la vivienda que adquirieron en la exclusiva urbanización madrileña de La Finca está en obras.

El chef por su parte, ha optado por alojarse en un hotel próximo a Diverxo, su restaurante insignia, en lugar de acompañar a su esposa y su hija y estar con ellas el mayor tiempo posible.

El distanciamiento físico que subraya Diez Minutos se ha visto acompañado por una serie de publicaciones enigmáticas de Pedroche en Instagram, que han avivado las dudas sobre el estado de su relación. "La conclusión que saco de estos días es que hacer una mudanza embarazada y con una niña pequeña debería estar prohibido", escribió recientemente. A ello le siguieron otras frases como "Demasiadas cosas, pero al final todo se va poniendo en su sitio", "Yo a lo mío" o "Es viernes y Miley Cyrus ha sacado una nueva canción. Tengo motivos para ser feliz", sin ofrecer claridad sobre su situación con Muñoz.

Las imágenes que aporta la revista correspondientes al penúltimo fin de semana de marzo refuerzan la percepción de una vida por separado. El viernes 21, Pedroche fue fotografiada junto a su padre mientras realizaba gestiones en Vallecas. A su regreso, ambos descubrieron que vándalos habían roto una de las ventanillas de su coche familiar, un incidente que dejó a la presentadora visiblemente molesta, según se aprecia en las instantáneas, donde aparece sin maquillaje y con un abrigo que dejaba entrever su embarazo de cinco meses. Dos días después, el domingo 23, Muñoz fue captado cerca del domicilio de sus suegros portando varias bolsas de la pastelería Oriol Balaguer. Allí mantuvo un breve encuentro con el padre de Cristina en la puerta, antes de subir al piso para recoger a Laia y pasar el día con ella. No hubo así indicios de un reencuentro con su esposa, lo que añade un matiz de extrañeza a este gesto.

La relación entre Pedroche y Muñoz, que comenzó en diciembre de 2015, ha sido siempre un reflejo de su intensidad como pareja: apasionada, pública y, en ocasiones, compleja. Con la llegada de su segundo hijo en el horizonte el futuro del matrimonio parece más incierto.

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