María García de Jaime y Tomás Páramo, de boda en Córdoba

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La pareja de 'influencers' disfrutó de la gastronomía de la Ermita de la Candelaria durante la preboda de unos amigos

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María García de Jaime y Tomás Páramo en Ermita de la Candelaria
María García de Jaime y Tomás Páramo en Ermita de la Candelaria / Redes Ermita De La Candelaria

María García de Jaime y su marido, Tomás Páramo, están de visita en Córdoba. La pareja de influencers ha acudido a la boda de unos amigos, Leticia De Colmenares y Javier López, que han contraído matrimonio en la mañana de este sábado 9 de diciembre -a juzgar por las imágenes que María ha compartido en redes- en la iglesia de San Francisco y San Eulogio de la ciudad.

Pertenece al grupo de las denominadas iglesias fernandinas, aquellas que fueron mandadas construir por el monarca castellano Fernando III en el siglo XIII. Lo que no muchos saben es que su nombre original fue el de convento de San Pedro el Real y fue gestionado por la Orden Franciscana, lo que fomentó su actual nomenclatura. La Iglesia de San Francisco y San Eulogio fue declarada Bien de Interés Cultural, en la categoría de Monumento, el 24 de marzo de 1982.

De incuestionable valor histórico, artístico y patrimonial, los restos, parcialmente restaurados del claustro de esta iglesia conventual, envuelven las inmediaciones en un ambiente casi romántico. Aunque fundado en el siglo XIII, experimentó varias remodelaciones tanto en el convento como en el templo, que resultó gravemente dañado tras las desamortizaciones del XIX.

La portada de acceso al templo, que asombra a todo el que lo visita, es de estilo barroco y está realizada en mármol. Alberga una hornacina con la imagen de Fernando III el Santo. La iglesia se articula en una única nave y crucero, y destaca por su suntuosidad su impresionante retablo dieciochesco.

María y Tomás asistieron anoche a la preboda que tuvo lugar en uno de los mejores restaurantes de Córdoba, la Ermita de la Candelaria. Y a juzgar por los comentarios de la creadora de contenido en sus redes les encantó: "El sitio, espectacular, y la comida buenísima". Además tuvieron tiempo de callejear por la noche cordobesa en compañía de amigos, con los que posaron a las puertas de la Iglesia de Santa Victoria.

El matrimonio ha aprovechado su estancia en Córdoba para pasear por la ribera, las inmediaciones de la Mezquita-Catedral y se ha adentrado en La judería, donde María exclamaba a las puertas de La Taberna El Nº10: "Me encanta Andalucía".

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