Chimeneas dulces, el último capricho de los más golosos en Córdoba

Córdoba se abre al mundo una vez más a través de la gastronomía. Un viaje a Centro Europa inspiró a Pedro Marcos Parra, su gerente, a replicar en España el dulce más popular de Hungría, con forma de chimenea. Así nació Corduba Chimney, que acaba de abrir sus puertas en el Centro Comercial El Arcángel.

"Le pusimos Corduba Chomney porque nuestra especialidad son los dulces de chimenea. Hace referencia a una ciudad milenaria y su cultura como es Córdoba", asegura Marcos.

Así mismo, insiste: "La idea surgió durante un viaje a Praga y Budapest. Probamos unos dulces que estaban muy buenos y que podíamos replicarlos aquí. Llevo un año gestionando el proyecto. Es una apuesta por algo innovador y con el toque particular y especial de Córdoba".

En sus variedad de chimeneas las hay clásicas y también de vanguardia. Las primeras se parecen más a las originales de Centro Europa, con canela, azúcar y con algún sirope de caramelo o chocolate.

"Con las que hemos innovado son los que están coronadas por helados de sabores tan diferentes como frambuesa, dulce de leche, pastel cordobés, turrón... elaborados artesanalmente por el maestro José Ambrosio", destaca.

Y quienes quieran ir un paso más allá en el mundo de las repostería, sus clientes pueden probar los kürtős kalács -que son los nombres originales de estas chimeneas- de carbón activo. Son de color negro, el ingrediente fundamental es el coco y "su sabor creemos que puede encajar con los gustos de la tierra".

Para los clientes con gustos más clásicos también venden croissants, palmeras o pastel cordobés. Tiene servicio de cafetería, heladería y hacen gofres y crepes.

Definitivamente, estamos ante una pastelería y heladería creativa, "con mezcla de cultura y sabores".

Hay una pequeña terraza en el centro comercial para tomarse el producto elegido. Aunque el cliente también se lo puede tomar en el propio local o llevárselo a su casa.