Diez razones para visitar el Palacio de Viana en Córdoba
Un total de 18 propietarios se han sucedido en cinco siglos
Los mejores bares de Córdoba para acabar 2024 de tapas
El Palacio de Viana es uno de los monumentos más visitados y famosos de Córdoba. Se trata de uno de los principales escenarios de la vida artística y cultural de la ciudad. No obstante, hay muchos detalles y secretos que son desconocidos para el gran público. ¡Te retamos a que cuentes cuántos de estos diez datos sabías:
- Viana está bajo la gestión de la Fundación Cajasur desde 1980 y puede presumir de aglutinar la mayor concentración de patios de la ciudad, concretamente 13.
- Su distribución, decoración y estructura actual refleja la sucesión de la personalidad y los gustos de las familias que la habitaron entre 1425 y 1980.
- Un total de 18 propietarios se han sucedido en cinco siglos y han ido ampliando y transformando un grupo de casas de la Baja Edad Media.
- La última marquesa de Viana fue Sofía de Lancaster, quien se esforzó por mantener el exquisito origen de este palacio del siglo XIV.
- El Palacio fue declarado Monumento Histórico-Artístico Nacional en 1981 y dos años después, en 1983, Jardín Histórico-Artístico.
- Es a comienzos del siglo XIX cuando se incorporó uno de los espacios más impresionantes del Palacio, el Jardín, un auténtico laberinto.
- Para ello el VII marqués de Villaseca y conde de Villanueva de Cárdenas llegó en 1814 a un acuerdo con los condes de Torres Cabrera, quienes poseían varias casas colindantes para permutárselas por un cortijo.
- Aunque si hay un elemento que atrae irremediablemente a los visitantes es el cenador grutesco circular.
- Hay una sala dedicada a Julio Romero de Torres. En la sala dedicada al artista cordobés destaca La Saeta (1917), obra de madurez que refleja el sentimiento de la Semana Santa andaluza. A un lado se encuentra Amor místico y amor profano (1908) de la etapa Modernista y Simbolista del autor. Enfrente se exhiben los retratos del empresario cordobés don Antonio Muñoz Gassín y su esposa, doña Salvadora Pérez Ortí
- En el Salón Rojo hay piezas memorables, como la lámpara de cristal de Bohemia, y el retrato de la reina Victoria Eugenia realizado por Joaquín Sorolla en 1918.
También te puede interesar
Lo último