Las tartas de queso favoritas de los cordobeses son...

Actualmente no hay carta que se precie que no incluya en su apartado de postres una buena tarta de queso, y cuanto más casera, mejor. Si antes los chefs se ceñían a las recetas más ortodoxas de cheesecake, ahora intentan innovar y alejarse al máximo de la norma. La tendencia es emplear más de un queso -algunos de proximidad- varias texturas y puntos de cocción diferentes por zonas. Igualmente, elegir la cobertura se ha convertido en todo un arte. En Córdoba podemos encontrar la tarta con un toque de frutos rojos, ya sea en versión helado, confitura, sirope, o con los propios arándanos, fresas, frambuesas o grosellas frescos y puestos frescos sobre el pastel. Otra opción es la miel o el dulce de leche. Incluso los frutos secos combinan a la perfección. También hay que cocineros que reinventan la fórmula y en nada recuerda a la original. Se decantan por el formato mousse, bomba o incluso sopa fría a base del queso o quesos elegidos. También en esta última cuestión las modas cambian. Si antes se empleaban quesos cremosos y de sabores suaves, ahora se buscan referencias con personalidad y matices, y en muchas ocasiones se mezclan varios tipos.