¿Cuál es la única ruta por los Patios de Córdoba que transcurre fuera de los patios?
Los cuidadores de los recintos han inspirado diferentes conjuntos escultóricos distribuidos por la ciudad
Patios de Córdoba 2025: fechas, horarios y recintos que tienes que visitar

José Manuel Belmonte es el autor de tres conjuntos escultóricos distribuidos por sendos barrios de Córdoba y que reproducen el espíritu de la Fiesta de los Patios a pie de calle y sin necesidad de guardar colas.
Cuidar de un patio cordobés es un estilo de vida en sí mismo. Son 365 días al año de mimos, atenciones, riegos, podas y demás actividades necesarias para que geranios, gitanillas y buganvillas luzcan en su esplendor, sobre todo, durante la primavera cordobesa.
Tal dedicación se merece no uno sino muchos homenajes por ser dignos continuadores de uno de los mayores emblemas de la ciudad y Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.
De hecho, en diversos rincones del centro histórico cordobés se ubican tres conjuntos escultóricos creados inspirados en las cuidadoras y cuidadores de los patios de la ciudad.
La primera fue inaugurada en abril de 2014. Bautizada como La Regaora, ocupa un lugar de honor en la Puerta del Rincón. Y se ha convertido en punto de atracción para turistas y paseantes. La protagonista es una mujer esculpida en bronce, que con su cubo de agua cerca riega sus macetas con una caña y una lata, evocando el mimo con el que Córdoba cuida sus patios.
Belmonte es el creador también de Abuelo y niño, en la Plaza de Manuel Garrido Moreno. La representación es una alegoría del nexo que une las pasadas generaciones que dieron vida la Fiesta de los Patios y las futuras, que recibirán el testigo. El niño está subido a una escalera mientras que extiende la mano para recoger la maceta que le acerca su abuelo.
La trilogía escultórica de Belmonte la completa -desde el año pasado- El pozo de las flores, en la plaza Poeta Juan Bernier. La conforman dos figuras en bronce también. Las protagonistas son una abuela ataviada con delantal y alpargatas sentada en una silla y su nieta. La anciana sostiene una maceta en la que trasplanta geranios mientras que la niña porta una flor y mira a su abuela. Una pérgola, un pozo y una silla añaden tipicidad al resultado.
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