Saltarse un semáforo en rojo, superar el número de pasajeros autorizados, circular en dirección prohibida o por zonas peatonales, usando los auriculares o el teléfono móvil. Esos son algunos de los motivos que recoge el balance de sanciones de la Policía Local de Córdoba a patinetes eléctricos y bicicletas durante el recién concluido 2022, que recoge un incremento de casi el 8% respecto a un año antes.

El número de denuncias a los usuarios de patinetes eléctricos ha ascendido hasta las 521, por las 483 que se registraron en 2021. Una tendencia al alza que refleja directamente el uso cada vez más consolidado de estos vehículos en la sociedad. La zona de la ciudad en la que un usuario de patinete eléctrico tiene más fácil acabar con sanción si incumple la normativa sigue siendo el Centro (209 sanciones del total), quizás porque es la más vigilada. Le siguen el Distrito Sur con 82, Poniente (62), Levante (48) y el Distrito Norte (39).

Los infracciones más repetidas por los usuarios de patinetes en Córdoba atienden a un número de pasajeros superior al autorizado, no respetar la señalización o saltarse semáforos en rojo, circular por el acerado y zonas peatonales, conducir con auriculares o incluso carecer de autorización administrativa. Tan solo se recoge una sanción por ir conduciendo mientras se usaba el teléfono móvil y otra por conducción temeraria.

Respecto al uso de bicicletas, la suma de sanciones denunciadas por la Policía Local se reduce hasta las 102 en 2022, en comparación con el medio millar de los patinetes. Los motivos sí que coinciden, como el no respetar las señales y semáforos, circular por el acerado y zonas peatonales o conducir con auriculares. 

En la otra cara del informe, la siniestralidad decayó tanto en bicicletas como en patinetes durante el pasado año. Apenas imperceptible en el caso de las bicis, que pasa de 77 a 74, pero en el caso de los patinetes eléctricos sí que experimenta un descenso notable, de 91 accidentes en 2021 a 55 registrados en 2022.

El delegado de Movilidad y Seguridad del Ayuntamiento, Miguel Ángel Torrico, lo atribuye al "control exhaustivo" que está realizando el Consistorio ante la oleada de patinetes y asegura que "se controlará mucho más con la nueva ordenanza". La norma entrará en vigor a finales de enero y recoge por primera vez el fenómeno de los vehículos de movilidad personal (VMP), como los patinetes eléctricos, y contempla, entre otras cosas, la obligatoriedad a los usuarios de estos vehículos de un seguro de responsabilidad civil para el caso de que sufran algún siniestro, así como el uso del casco para circular por la ciudad.