Andalucía celebró sus terceras elecciones anticipadas de la autonomía el pasado 2 de diciembre. Fueron los segundos comicios que adelantó Susana Díaz como presidenta de la Junta, pero se trató de un adelanto de sólo unos meses pues, por fecha, debían ser en marzo de 2019.
Metodología: los periodos temporales no son exactos. Se ha considerado cada legislatura como un periodo cerrado de 4 años, independientemente de su mes de inicio y término.
El PSOE, que gobernaba en minoría desde los comicios de 1994 y, ante la imposibilidad de conseguir apoyos para sus propuestas por la fuerte oposición de PP e IU, acabó convocando las primeras elecciones adelantadas de Andalucía. Fue la legislatura más breve.
Sucedió en marzo de 2015, con Susana Díaz como presidenta de la Junta tras la renuncia de José Antonio Griñán en 2013. La falta de apoyos parlamentarios por la ruptura del pacto de gobierno con IU, situación calcada a la de 2018, aunque en esta ocasión con Ciudadanos como socio de coalición, fue la causa de este segundo anticipo.
La evolución de la participación en las elecciones autonómicas evidencia que la coincidencia entre comicios, sobre todo con los generales, sube el índice de participación ciudadana a la hora de votar. Siguiendo esta tendencia, la concurrencia a las urnas el 2-D fue la más baja de las últimas ocho elecciones autonómicas.
Manuel Chaves, con seis ocasiones, lidera el ranking de candidatos que más veces se ha presentado a la presidencia de la Junta (las seis acabó consiguiéndola). Le sigue Javier Arenas, con cuatro intentos. En el 2-D no hubo caras nuevas: todos los candidatos de 2015 repitieron.
Metodología: candidatos de los partidos que obtuvieron representación independientemente del resultado. (*) PCE, en 1982; e IU, a partir de 1986.
Andalucía no había conocido un presidente de la Junta que no militara en el PSOE. Los cinco anteriores a Juanma Moreno, lo han sido bajo estas siglas. El más longevo en el cargo fue Manuel Chaves, que casi alcanzó los 19 años de mandato. Le siguió Rodríguez de la Borbolla, con seis años.
Fue el primer presidente autonómico y también el más breve. Presentó su dimisión a los dos años de resultar elegido de manera inesperada. Las tensas relaciones que mantenía con el Ejecutivo central, presidido por Felipe González (también del PSOE), fueron una de las causas.
Sustituyó a Escuredo tras su dimisión y resultó electo en las elecciones de 1986. Durante su mandato le tocó lidiar con tensiones internas en el seno del PSOE (entre sus partidarios y los de Alfonso Guerra). No repitió como candidato en las autonómicas de 1990.
Es el presidente que más años ha estado en el cargo. Lo hizo durante 19 años de forma ininterrumpida, hasta que fue nombrado ministro y vicepresidente tercero del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero en 2009.
El que era vicepresidente de la Junta sustituyó a Manuel Chaves en el cargo de presidente. En julio de 2013 anunció su dimisión, coincidiendo con el Caso ERE en Andalucía, en el que se encuentra actualmente imputado.
Tras la renuncia de Griñán, la hasta entonces consejera de Presidencia e Igualdad se convirtió en la primera presidenta de la Junta de Andalucía. En enero de 2015 rompió el pacto con IU, que posibilitaba el gobierno, y convocó unas elecciones que la volvieron a situar en la presidencia gracias al apoyo de Ciudadanos.
Es el primer presidente autonómico del Partido Popular. Ejerció como Secretario de Estado de Servicios Sociales e Igualdad hasta el 1 de marzo de 2014 que fue elegido presidente del PP de Andalucía y candidato a la Presidencia de la Junta.
El PSOE gobernaba Andalucía desde 1982 de manera ininterrumpida. Ha sido el partido más votado en diez de las once elecciones celebradas, salvo en las de 2012, donde el PP fue el partido que más apoyos consiguió. El pacto del PSOE con IU le posibilitó el gobierno.
Las cifras de los socialistas en Andalucía resultan realmente sorprendentes: cinco mayorías absolutas y otras cinco mayorías simples, dos de ellas quedándose muy cerca de poder gobernar en solitario.